“Todos podemos enojarnos, eso es fácil.
Pero enojarnos con la persona correcta, en la medida justa,
en el momento adecuado, por la razón pertinente y del modo apropiado – eso no es fácil” –
Aristóteles
Las emociones y los sentimientos que experimentamos son energía, nos tenemos que ´poner en contacto con ellas porque tienen su mensaje, su propio lenguaje y su misión para nuestra evolución del alma. Pero ¿qué son las emociones? de acuerdo al diccionario "son reacciones psicofisiológicas que representan modos de adaptación a ciertos estímulos ambientales o de uno mismo", entonces vemos como ellas surgen como respuesta a un estimulo externo o interno tanto psicológica como fisiológicamente.
Las emociones surgen de manera espontanea, no entra la razón, y es por ello que su mensaje no esta contaminado, y se hace necesario por una parte reconocerlas , para luego aceptarlas y finalmente integrarlas. Este proceso puede llevar su tiempo, es por ello que los atajos, no existen, necesitamos dedicarle tiempo y atención, porque ello redundara en beneficios para tu salud física y mental, así como para aprender la lección que necesita tu alma para seguir evolucionando hacia mayores niveles de grado de consciencia.
El reconocimiento de una emoción suena sencillo , pero no lo es, las personas no están acostumbradas a entrar en contacto consigo mismo y con sus emociones, porque no estamos en una cultura donde se incentive la auto observación a través de la meditación y del silencio, por el contrario estamos inmersos en una sociedad donde se nos invita constantemente al embotamiento de los sentidos de tal forma que se nos facilite la evasión de nuestro mundo interior, con todo tipo de distracciones que impiden la interiorización y la concienciación del mundo infinito de las emociones.
Las emociones son como los colores , son infinitas y de distintas tonalidades e intensidades, son como el clima, como el cielo y las nube, imagínense la cantidad de sensaciones que experimentamos con nuestro maravilloso templo el cuerpo y no estamos ni siquiera consciente de ellos, se podría decir que somos en muchas ocasiones analfabetos en cuanto a la capacidad de elaborar una descripción exacta de lo que estamos experimentando como emoción. La confusión , la ignorancia, o la negación de las emociones son las conductas aprendidas en nuestras sociedades cuya misión es dirigir la atención hacia afuera y no hacia adentro.
Entonces es muy importante para comenzar estar atentos, y autoobservarnos, sentirnos y "sentarnos", como yo le digo, con la emoción que ha surgido desde lo profundo de nuestro interior y tratar de comprender y entender su mensaje y significado para nosotros mismos.
Tenemos distintos tipos de emociones desde la tristeza o la depresión que es una sensación de casi muerte donde el sujeto no siente energía, para por lo menos levantarse, se encuentra sumido en un hueco negro en el cual no sabe cómo salir. Dentro de esta tristeza, esta la melancolía, la nostalgia, el dolor, el sufrimiento, la impotencia, la frustración entre otras calificaciones de sensaciones con sus distintos grados de intensidad. La indiferencia, la frialdad, los celos, la envidia, la ira, el odio, la rabia, la cólera, y sus distintos grados de intensidad. Están las emociones como el orgullo, la soberbia, la alegría, el entusiasmo, la euforia, el éxtasis, la paz entre otras.
A las emociones tenemos que reconocerlas y calificarlas, no negarlas y reprimirlas, tenemos que hacer un esfuerzo consciente para describirlas, ponerle colores si quieres y grados de intensidad, esto es realmente darles una muy buena cordial bienvenida para hacer el trabajo que ellas requieren para tu evolución personal única.
Entonces te invito a que te sientes y medites con la emoción que haya tocado a tu puerta , ponle nombre y apellido, color e intensidad, ubícala si es posible en algún área de tu cuerpo, muchas veces las emociones como no son reconocidas se instalan en nuestro cuerpo en forma de sensación o de dolor, o enfermedad. Te aseguro que si te tomas el tiempo y la molestia para sentarte con tu emoción, ella te hará saber muchas cosas principalmente a que le pierdas el miedo y el temor a la situación que se te esta presentando y la ACEPTES.
Cuando reconocemos por una parte que una emoción esta haciendo su aparición, y la aceptamos estamos por buen camino, el camino del autoconocimiento y de la recepción del mensaje sagrado que tiene para que podamos continuar creciendo como seres espirituales que somos teniendo una experiencia en un cuerpo, templo sagrado del espíritu. La Aceptación surge de la comprensión y del no juicio de esa emoción, o de lo que estés experimentado, te guste o no, lo estás viviendo y tu cuerpo te lo hará saber , mientras más pronto la reconozcas , la aceptaras, y podrás integrarla, mientras la reprimas o la niegues ella seguirá ahí presente y se manifestara en tu cuerpo en forma de dolor o de enfermedad.
La integración de una emoción o varias de ellas, surgirá de manera espontanea por el trabajo que hayas realizado y el tiempo que le hayas dedicado a los dos pasos anteriores, es decir al reconocimiento de las mismas y de su aceptación, la paz en tu corazón y en tu mente serán los signos de que has hecho las paces con ellas y la lección fue aprendida y asimilada , preparándote para continuar evolucionando en la escuela llamada vida, con mas colores dentro de tu haber , más ligero y más pleno.
En suma , dediquémosle tiempo a sentir y no temer a las emociones, démosle la mas cordial bienvenida, reconozcámoslas dentro de nuestro mundo interior, decodifiquemos su mensaje sagrado, aceptemos de buena gana el regalo que nos traen, y disfrutemos de la paz que experimentemos al negarnos a negarlas y reprimirlas con sus consecuencias que en algunas ocasiones podrían en el mejor de los casos producir una enfermedad curable y en otras por la supresión ser fatales, es por ello que no existen los atajos, dedícales tu tiempo y atención , es la mejor y mayor inversión que puedes hacer para tu salud y felicidad mental y física.
Maria Tirone
Coaching Mistico
Personal & Empresarial
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